Derecho a la Vida
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Planned Parenthood enfrenta reacción negativa
- Planned Parenthood enfrenta críticas no solo por los esfuerzos del gobierno para retirarle fondos, sino también por parte de exdonantes, empleados y ejecutivos que afirman que la organización se ha desviado de su misión principal de atención reproductiva.
- Bajo la presidencia de Alexis McGill Johnson, la organización se ha expandido hacia causas de izquierda más amplias, incluyendo la ideología de género, el control de armas y reformas políticas, alienando a muchos seguidores de larga data.
- El uso de lenguaje neutral en cuanto al género, como “personas embarazadas” y “menstruantes”, ha provocado críticas por eliminar a las mujeres de su mensaje, siendo esta una de las principales razones citadas por los exdonantes para retirar su apoyo.
- Aunque Planned Parenthood recibió casi 700 millones de dólares en fondos gubernamentales en 2022, muchas clínicas de primera línea tienen dificultades financieras. Los críticos también señalan compensaciones excesivas a ejecutivos y un personal nacional inflado.
- Exdonantes expresaron frustración porque sus contribuciones financian activismo político en lugar de servicios de salud, acusando a la organización de actuar como herramienta partidista del Partido Demócrata.
Según un reciente informe del Wall Street Journal (WSJ), donantes clave, exejecutivos e integrantes de la organización expresan creciente preocupación por el cambio de enfoque de su misión original de atención médica hacia un activismo de izquierda cada vez más amplio. Bajo el liderazgo de la actual presidenta Alexis McGill Johnson, Planned Parenthood ha ampliado su enfoque público más allá de la atención reproductiva para incluir temas como ideología de género, control de armas, reformas del Senado y reestructuración de la Corte Suprema. (Relacionado: En la última locura médica, Planned Parenthood ahora ofrece inyecciones químicas para personas transgénero en la PRIMERA visita.)
Bajo la actual presidenta Alexis McGill Johnson, Planned Parenthood incrementó en gran medida su agenda izquierdista
El material promocional de Planned Parenthood ahora hace referencia a las mujeres solo en el contexto de eslóganes como “Apoya a las Mujeres Negras”. Mientras tanto, la terminología más amplia gira en torno a la neutralidad de género y la llamada “autonomía corporal”, una frase que abarca tanto el acceso al aborto como los servicios médicos para personas transgénero.
Las cifras recientes de recaudación de fondos revelan problemas más profundos. Aunque la organización experimentó un repunte tras la decisión de la Corte Suprema en 2022 que anuló Roe v. Wade, ese aumento no fue sostenible. Desde entonces, las donaciones han caído un 15 % desde su punto máximo de 428 millones de dólares en 2022, con una parte significativa de esos ingresos destinada supuestamente a la defensa política y no a los servicios de salud.
Los donantes dan la espalda
Exempleados citados en el informe describieron la oficina nacional como inflada, con demasiados empleados de altos salarios en funciones poco claras. Según las declaraciones fiscales más recientes, McGill Johnson recibió más de 900.000 dólares en compensación. Sin embargo, las clínicas de primera línea –especialmente las ubicadas en zonas desatendidas– enfrentan dificultades.
A pesar de haber recibido casi 700 millones de dólares en reembolsos y subvenciones gubernamentales en 2022, muchas clínicas de Planned Parenthood operan con déficit. Exejecutivos y personal han descrito la sede nacional como inflada y jerárquica, con funciones poco claras y salarios altos. McGill Johnson ganó más de 900.000 dólares ese año, según los registros fiscales de la organización.
Además de realizar cerca de 393.000 abortos en un solo año, Planned Parenthood se ha expandido al ámbito de la atención sanitaria para personas transgénero, ofreciendo terapia hormonal y bloqueadores de la pubertad en docenas de centros. Su informe anual de 2022 indicó que 45 filiales brindaban atención llamada “de afirmación de género”, incluidos servicios para menores, práctica que ha generado mayor controversia y escrutinio.
En un artículo separado, Live Action destacó que varios comentaristas del artículo del WSJ, quienes se identificaron como exdonantes, dijeron que dejaron de contribuir después de descubrir que la postura de la organización era significativamente más extrema de lo que habían creído originalmente.
“Fui donante de Planned Parenthood durante mucho tiempo. Recibir solicitudes de recaudación que no usaban la palabra ‘mujer’ y nos llamaban ‘personas embarazadas’, ‘menstruantes’ o ‘personas que amamantan con el pecho’ estaba tan fuera de lugar que hablé con la directora de mi capítulo local”, contó una comentarista llamada Sharon.
“[La directora del capítulo] me miró con ojos vidriosos y dijo: ‘Nuestro personal cree en la inclusión’. Cuando tu inclusión significa borrar a las mujeres y se supone que eres una organización feminista, has perdido totalmente el rumbo. Sé que muchas otras mujeres también dejaron de apoyarlos por esta razón.
Otros comentaristas compartieron posturas similares sobre el artículo. Exdonantes dijeron que les sorprendió enterarse de que sus aportes podían estar financiando cabildeo político en lugar de atención directa al paciente, y algunos calificaron al grupo de ser un “esquema de lavado” para el Partido Demócrata.
Planned Parenthood alguna vez promovió el aborto como necesario bajo la consigna de “atención reproductiva”. Pero la organización aparentemente llevó su estrategia demasiado lejos, y muchos ahora la ven como una entidad políticamente impulsada, desconectada de su misión original y de los donantes que alguna vez la apoyaron.
Publicado el 21 de agosto de 2025
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